Guía para que tus platillos con carne de pollo mejoren
La carne de pollo es un ingrediente bastante difícil de preparar, por ejemplo las pechugas grandes son casi imposibles de cocinar de manera uniforme. Para cuando el interior está bien cocido, el exterior está casi quemado. Lo anterior también puede se aplica para las piezas orgánicas y más pequeñas, que pueden estar un poco torcidas. La respuesta a este problema es golpearlos un poco para aplanarlos, de esta manera obtendrás una cocción perfecta.
¿Cómo puedo aplanar correctamente la carne de pollo?
La manera clásica de hacerlo es colocando en un trozo de plástico la pechuga de pollo. Después cubrirla con otro pedazo de envoltura del otro lado. Use el lado plano de un mazo para carne o un rodillo para golpear firmemente hacia abajo y hacia un lado. No te limites a machacar o puedes romper la carne. El objetivo es hacer que la pechuga sea más uniforme para que se cocine más rápido.
La mejor manera de cocinar pechuga de pollo en sartén
Primero tenemos que centrarnos en cómo cocinar una pechuga de pollo en la sartén, que es la técnica favorita de muchos cocineros debido a la corteza tan sabrosa que se forma. La carne de pollo debe estar a temperatura ambiente antes de meterlas en la sartén, ya que el pollo frío puede cocinarse de manera desigual y tiende a quedar dura. Deja reposar la carne durante 20 minutos. Este truco bastará para darle mejor sabor a tus platillos favoritos.
¿Por qué las pechugas de pollo siempre me quedan secas y duras? Asegúrate de dejar reposar las pechugas de pollo de 3 a 5 minutos una vez que se hayan terminado de cocinar. Si cortas la carne de inmediato, los jugos del interior, que están hirviendo, saldrán y la endurecerán irremediablemente. También debes asegurarte de dejar que se asiente a temperatura ambiente durante 20 minutos antes de cocinarla. Esto quitará el frío y permitirá que la pieza se cocine de manera uniforme.
