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Mejores cocteles de vinos y licores europeos

Hemos seleccionado algunos de los mejores cócteles de vinos y licores comunes de Europa para probar, ya sea que esté planeando un viaje o simplemente quiera agregar un toque europeo a su hora de cócteles en casa.

Oporto Blanco y bebida tónica (como uno de los vinos y licores más ricos)

Este aperitivo portugués no tiene nombre oficial porque es muy básico. El oporto blanco tiene un sutil aroma a cítricos y miel, comparable al de Lillet, y es menos dulce que los puertos rubí y leonado.

  • Es lo suficientemente ligero como para abrir el apetito para una cena de feijoada, quiejo y bacalhau cuando se vierte sobre hielo y se combina con tónica.

Kalimotxo

Se supone que la infame bebida de vino tinto y Coca-Cola, conocida en España como Kalimotxo, se originó como una forma de disfrazar el sabor del vino barato que no querrías beber solo. El cóctel, cuando se sirve con hielo, sabe en gran medida a Coca-Cola con un regusto a vino, y si tiene un vino tinto particularmente afrutado, incluso puede saber a Coca-Cola de cereza.

Tinto de verano (incluida como bebida de vinos y licores)

España parece estar en busca de nuevas formas de condimentar su consumo de vino tinto, y el tinto de verano es el acompañante ideal de cócteles de vino de verano. El tinto de verano, que se traduce como “vino tinto de verano”, se elabora con mitad de vino tinto y mitad gaseosa (refresco de lima-limón) vertido sobre hielo.

Fröccs

Fröccs es el “vino spritzer original”, según la leyenda, que se desarrolló en 1842 en una cena húngara. En verdad, fröccs es una palabra húngara que significa “spritzer”.

  • Pero no sorprende que la ahora famosa combinación se originara en Hungría. En Hungría se producen muchos vinos blancos y rosados ​​crujientes y frutales, incluidos olaszrizling y fröccs.

Bellini

El Bellini, una bebida italiana a base de prosecco popular en los menús de brunch en los Estados Unidos, es ciertamente reconocible para usted. Se dice que a mediados del siglo XX, un conocido cantinero inventó el Bellini en el famoso Harry’s Bar de Venecia. Simplemente mezcle una parte de puré de durazno y dos partes de prosecco para hacer uno como el de Harry.